Problemas emocionales
Ansiedad
Podemos describir la ansiedad como una respuesta de nuestro cuerpo a una amenaza frente a la que nos sentimos sin recursos. La ansiedad toma muchas formas, aunque son comunes las taquicardias, hormigueos en brazos y piernas, sensación de asfixia, temor a morir o a perder el control. Se trata de un problema frecuente pero que limita enormemente a la persona que lo vive.
El primer paso para superar el bloqueo ansioso es identificar aquello que produce esa ansiedad, para poder adaptar nuestras herramientas de afrontamiento en cada situación particular. Es el objetivo de la terapia psicológica que aprendas a manejarte con ansiedad y que deje de controlarte, ganando conocimientos y habilidades que vas a poder utilizar en el futuro.
Depresión
La tristeza es una emoción que todos hemos sentido alguna vez, pero la depresión va más allá. Es un problema psicológico en el que sentimos que no disfrutamos de lo que antes sí, una profunda apatía o tristeza, desesperanza, pensamientos de muerte, vacío existencial…
No hay nada más frustrante que escuchar a personas cercanas insistir en todo lo que tienes que hacer para estar bien, cuando levantarse de la cama ya es un logro en sí mismo.
Una terapia psicológica personalizada puede ayudar poco a poco a reconectar con tus valores y una vida de calidad, acompañando durante todo el proceso y yendo a tu propio ritmo.
Autoestima
La relación con nosotros mismos es esencial para la salud mental. Las redes sociales, la autoexigencia, ambientes demasiado críticos o falta de habilidades sociales y asertividad son algunas de las muchas razones por las que podemos estar insatisfechos con nosotros mismos.
Ese descontento con nosotros mismos se extiende a muchos entornos, y frecuentemente nos bloquea y nos aleja de nuestros objetivos, de la vida que queremos vivir. La terapia psicológica es la principal manera en la que podemos cambiar esa relación con nuestro yo, aumentando la calidad de vida y la tranquilidad con la que afrontamos nuestra vida.